El cangrejo de los cocoteros, también llamado cangrejo ladrón o ladrón de palmeras, es el invertebrado más grande del mundo y su hábitat natural se encuentra en el las costas del Océano Pacífico.
Su nombre científico es Birgus Latro y su tamaño llega a los 40 centímetros de largo y un peso de 4 kilogramos. A pesar de su aparente pequeñez, puede penetrar la dura cáscara del coco con sus pinzas y arrastrar objetos de hasta 30 kilogramos.
Pertenece a las llamadas especies ermitañas, es decir que utilizan un caparazón ajeno como protección, pero en realidad es un derivado de ellas, ya que sólo lo hace en época de muda.
Es una especie que llama la atención de los turistas que la contemplan, aunque no de los pobladores que comparten su hábitat, quienes están acostumbrados a convivir con ellos. Suele vérselos escalando los cocoteros hasta llegar a los seis metros de altura y alimentándose del contenido del coco, el cual abren con una fuerza impresionante gracias a sus poderosas tenazas. Aunque no suele ser una amenaza para el ser humano, pueden llegar a atacar si se ven en situación de peligro o son molestados.
Si bien su tamaño puede ser normal –sobre todo en las hembras- muchos especímenes alcanzan tamaños gigantescos que asombran a cualquiera que no está acostumbrado a contemplar un cangrejo tan grande.
Los humanos se han aprovechado de la capacidad de lucha de esta especie y muchos pobladores las crían y utilizan como guardianes de sus plantaciones de coco. Además, se lo consume como carne por los habitantes de estas zonas playeras, siendo los huevos de las hembras y su grasa abdominal las preferidas por los comensales. Tiene fama de manjar y lo más sorprendente, de afrodisíaco. Pero también se han reportado casos de intoxicación por ingerir su carne, pero se cree que se debe a plantas venenosas con las que el artrópodo ha entrado en contacto.
En algunos países como Japón, se los vende como mascotas.
Fuente | Ojocientífico
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Todos los comentarios que contengan enlaces serán eliminados automáticamente.